Pasta con Salsa Pesto de Espinacas y Anacardos

La pasta con salsa pesto de espinacas y anacardos es una variación deliciosa y nutritiva del pesto tradicional. Este tipo de pesto se caracteriza por su color vibrante y su sabor suave, gracias a las espinacas frescas, y su toque cremoso, aportado por los anacardos. Es una receta perfecta para aquellos que buscan un plato rápido y lleno de sabor, ideal tanto para un almuerzo en familia como para una cena ligera y deliciosa.

Este pesto de espinacas con anacardos es una excelente alternativa al clásico pesto de albahaca, ya que las espinacas ofrecen un perfil de sabor más suave y los anacardos proporcionan una cremosidad inigualable. Además, este tipo de pesto es muy versátil y puede utilizarse no solo con pasta, sino también como aderezo para ensaladas, untado en sándwiches o incluso como acompañamiento de vegetales.

A continuación, te mostraré cómo preparar este delicioso plato en unos sencillos pasos. ¡Sigue leyendo para descubrir la receta completa y algunos consejos adicionales!

Ingredientes

Para esta receta de pasta con pesto de espinacas y anacardos, necesitarás los siguientes ingredientes:

Para el pesto:

  • 150 gramos de espinacas frescas
  • 70 gramos de anacardos (crudos o ligeramente tostados)
  • 1 diente de ajo
  • 60 gramos de queso parmesano rallado
  • 100 ml de aceite de oliva extra virgen
  • Jugo de medio limón (opcional)
  • Sal y pimienta al gusto

Para la pasta:

  • 400 gramos de pasta (puedes elegir tu tipo favorito: espaguetis, penne, fusilli, etc.)
  • Agua para cocer la pasta
  • Sal al gusto

Para decorar (opcional):

  • Espinacas frescas
  • Anacardos troceados
  • Queso parmesano adicional

Preparación paso a paso

1. Prepara los ingredientes

Antes de comenzar a hacer la salsa pesto, asegúrate de lavar bien las espinacas frescas bajo el agua fría. Luego, deja que se escurran completamente para evitar que el exceso de agua diluya el pesto. Si los anacardos que vas a utilizar están crudos, puedes tostarlos ligeramente en una sartén sin aceite para intensificar su sabor. Sin embargo, esto es opcional, ya que crudos también funcionan perfectamente.

2. Cocina la pasta

En una olla grande, pon a hervir agua con sal. Añade la pasta cuando el agua esté hirviendo y sigue las instrucciones del paquete para obtener una cocción al dente, que generalmente tarda entre 8 y 12 minutos, dependiendo del tipo de pasta que elijas. Una vez que la pasta esté lista, escúrrela y reserva un poco del agua de la cocción (aproximadamente una taza) para mezclarla más tarde con el pesto si fuera necesario.

3. Prepara el pesto de espinacas y anacardos

Mientras se cocina la pasta, puedes comenzar a hacer la salsa pesto. En un procesador de alimentos o licuadora, añade las espinacas frescas, los anacardos, el diente de ajo pelado, el queso parmesano rallado, el jugo de limón (si decides usarlo) y una pizca de sal y pimienta.

Comienza a procesar todos los ingredientes mientras agregas gradualmente el aceite de oliva. El aceite ayudará a que la mezcla se vuelva suave y cremosa. Si notas que la salsa está muy espesa, puedes añadir un poco del agua de cocción de la pasta para ajustar la consistencia a tu gusto. El resultado debe ser un pesto suave, cremoso y con un color verde brillante.

4. Mezcla la pasta con el pesto

Una vez que la pasta esté cocida y la salsa pesto lista, es momento de combinar ambos elementos. En una sartén grande, agrega la pasta recién cocida y vierte el pesto sobre ella. Mezcla bien para que cada trozo de pasta quede cubierto de manera uniforme con la salsa pesto de espinacas y anacardos. Si lo prefieres, puedes calentar ligeramente la pasta con el pesto en la sartén a fuego bajo durante un par de minutos para que todos los sabores se integren a la perfección.

Si ves que la pasta está un poco seca, puedes añadir pequeñas cantidades del agua de cocción que reservaste para darle un toque extra de cremosidad sin perder el sabor.

5. Sirve y decora

Cuando la pasta esté bien mezclada con la salsa pesto, sírvela inmediatamente en platos hondos. Para darle un toque decorativo y aún más sabor, puedes añadir algunas hojas de espinacas frescas encima, espolvorear unos anacardos troceados y un poco más de queso parmesano rallado. Este último toque no solo añade color, sino que también aporta una textura crujiente y más sabor.

Sugerencias para servir

Esta pasta con pesto de espinacas y anacardos es una receta muy versátil. Puedes disfrutarla como plato principal, acompañamiento o incluso como parte de un menú más amplio. Aquí te dejo algunas sugerencias de cómo servir este delicioso plato:

  1. Pasta fría: Si prefieres un plato más refrescante, puedes dejar enfriar la pasta antes de mezclarla con el pesto y servirla como una ensalada de pasta fresca.
  2. Acompañada de proteínas: Este plato combina muy bien con otros ingredientes, como champiñones salteados o trozos de tofu asado.
  3. Comida ligera: Puedes servir porciones más pequeñas como parte de un menú de varios platos o como una cena ligera.

Consejos adicionales

  • Espinacas frescas vs. congeladas: Si no tienes espinacas frescas a mano, puedes utilizar espinacas congeladas. Asegúrate de descongelarlas bien y eliminar el exceso de agua antes de usarlas en la receta.
  • Anacardos: Los anacardos aportan una textura cremosa muy especial a esta salsa pesto. Si prefieres, puedes sustituirlos por otras nueces, como almendras o nueces de macadamia.
  • Almacenamiento: El pesto de espinacas y anacardos se conserva bien en el refrigerador durante unos 3-4 días en un recipiente hermético. Incluso puedes congelarlo en porciones pequeñas para usarlo más tarde.
  • Variaciones del pesto: Esta receta es muy flexible. Puedes experimentar con otras hierbas verdes como la albahaca o el cilantro, o añadir un toque de chiles para darle un sabor más picante.

Conclusión

La pasta con salsa pesto de espinacas y anacardos es un plato sencillo, rápido y lleno de sabor. Con ingredientes frescos y un proceso de preparación fácil, esta receta es ideal para cualquier día de la semana. Además, su versatilidad te permite adaptarla a tus preferencias personales, ya sea cambiando los ingredientes del pesto o acompañándola con otros elementos.

No importa cómo decidas disfrutarla, esta pasta con pesto de espinacas y anacardos será un éxito seguro en la mesa. Atrévete a probar esta receta y sorprende a tus comensales con un plato colorido, cremoso y lleno de frescura.

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